De haber tenido este cuaderno cuando estaba pequeña definitivamente hoy en día no tendría traumas con las matemáticas. Qué bien por el diseñador Marc Thomasset que logró divertirse al convertir un cuaderno plano, básico y aburrido en toda una fuente de inspiración.


2 comentarios:
Uff que bueno, yo quiero uno!
Si! Todos seríamos tan felices con uno! :)
Publicar un comentario